307 Si ya éramos pocos parió la abuela

Pues nada, antes de abrir la puerta del jardín.... Natalia y yo nos encotramos a este bebé gatito y le salvamos del ataque de Orejas de Serpiente.

Y nada, pues no hubo mas historia que me lo tuve que quedar. Vaya!! y yo que nunca pensaba tener un gato. De la noche a la mañana, zas!! sorpresa. Yo soy más de perros que de gatos... pero ahora... me tengo que hacer de gatos.


Le llevé a un amigo veterinario, fuera parásitos por fuera (pulgas) y por dentro. Todo listo, le compré comida y un cuenco y a correr. Los gatos no son como los perros, no hace falta enseñarles, son la mar de listos y van a su bola total.

Así que nada, los primeros días en el baño y poco a poco conmigo y en la cabaña. El gatuno, se trepa por mis pantalones, incluso si no tengo camiseta por mi espalda hasta mi hombro. Como si fuese un loro. Y no para de ronear (je je yo no sabía que era eso, yo pensaba que era bronquitis!! je jepero Natalia dice que eso es que está contento!!).

¿qué nombre le ponemos?

pues como está "espeluchao" peluchilla o como tiene los ojos amarillos "amarilla"...
pero recordé una cosa de la infancia...

Yo aprendí a leer y a escribir (lo que me dedico ahora con el proyecto de alfabetización) con las cartillas de Micho...


Así que mi nuevo compañero, bueno mejor dicho compañera es...

Michu!!!

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