-EDAD: 29
-UNIVERSIDAD: UPM (Universidad Politécnica de Madrid)
-PROFESIÓN: Ingeniera de Montes …pero más pianista
-DESTINO: Filipinas
-SUPERHÉROE FAVORITO: ¡BOCA SECA MAN! (…tiene la lengua como un gatete!) (viva la hora chanante, muchachada nui…y lo que venga!)
-¿CUÁL ES TU TRABAJO ALLÍ?
-¿COMO TE ADAPTASTE?
Sin embargo, en lo que al trabajo se refiere, no es un país fácil. La organización en la que trabajé (Earth Rights, People Rights_ERPR) es una organización local (filipina) en la que la mayoría de las personas involucradas tienen otros trabajos y se reúnen sólo de vez en cuando. Sólo una de ellas, la que era mi jefa, estaba de forma permanente en la oficina. Además de ella, había otra persona haciendo trabajos administrativos, que cambió varias veces durante mi estancia allí. Con esto quiero decir, que al trabajar en una organización tan pequeña, con gente mayor que ya tiene vidas muy “hechas”, no es fácil integrarse en otro nivel que no sea el puramente laboral.
Además, en mi caso particular, una vez que finalizó el periodo de prueba, (o de adaptación) que me había marcado yo misma, me di cuenta de que mi trabajo no era prioritario, y no se le daba ninguna importancia. Sospechaba que estaba allí más bien para conseguir fondos para la ONG y, como yo insistía en el trabajo de campo, no se me tenía muy en cuenta. Tampoco recibí ninguna formación acerca del trabajo de la ONG, ni de sus proyectos, ni de sus prioridades, ni de sus perspectivas ni expectativas acerca de mis 6 meses con ellos…Estuve mucho tiempo sin hacer nada, y eso, en cierta manera, es algo muy frustrante cuando se ha ido con muchas ganas de trabajar.
¿Qué puedo decir entonces de mi adaptación? Pues que, desde mi punto de vista, hice todo lo posible por conectar con la organización y especialmente con mi jefa, pero que nunca me sentí bien acogida por ella.
-¿LO QUE MAS TE GUSTA DE TU DESTINO?
La amabilidad de los que me ayudaron, la buena acogida de aquellos que me dieron la oportunidad de hacer algo, la buena conexión con algunos de los voluntarios con los que he compartido mucho…
Me gustó mucho conocer el mundo indígena, absolutamente desconocido para mi…
-¿LO QUE MENOS TE GUSTA?
El sentimiento de impotencia cuando las cosas van mal y no se puede hacer nada. Saber que estás ahí sólo por 6 meses, y que hay cosas que es mejor dejar pasar porque no tiene sentido que actúes o inicies algo cuando al poco tiempo te vas…
La corrupción en Filipinas se encuentra en todos lo niveles. Eso es algo que llama muchísimo la atención. Es cierto que muchos países desarrollados, también viven casos de corrupción (véase España), sin embargo, la corrupción se castiga y la sociedad civil se escandaliza con estos casos. En Filipinas, este hecho está tan asumido, que no hay salida. Se sabe que las instituciones públicas, la política... todo está tocado de alguna manera por la corrupción, y así es muy difícil que nada avance.
-¿QUE LE DIRÍAS A ALGUIEN QUE QUIERA SER VOLUNTARIO?
Puedes participar en un grupo en la parroquia, o en un grupo scout, o en una asociación de inmigrantes, o dando apoyo escolar, o haciendo actividades con discapacitados…¡la lista es infinita!. Pero también con alguien de la familia que nos necesita más, o en nuestra propia comunidad, en la universidad, en el trabajo, con alguien que está en apuros…
También creo que lo que “mueve” a las personas a participar en actividades de voluntariado es algo personal y muy diverso. Concretamente, en el mundo de la cooperación para el desarrollo, las motivaciones que yo he encontrado son enormemente dispares. Si alguien quiere ser voluntario porque piensa que los voluntarios son todos generosos, solidarios, atentos, que luchan contra injusticias…no sé, cosas que meteríamos en el cajón de “las buenas personas”, que no se haga ilusiones. Es un mundo complejo, y también a veces muy decepcionante. Hay que ir preparados para los fracasos y para los desánimos. En definitiva, no hay que idealizarlo sino ir con los ojos bien abiertos para reaccionar ante aquello que no nos gusta.
-LO MÁS RARO QUE HAS VISTO
Filipinas es el país número UNO del mundo en envío de mensajes de móvil. Y es que lo de llamar por teléfono, no se trabaja demasiado. Para todo te dicen “¡Text me!”. Y así se pasan la vida, “texteándose” unos a otros. Vas por la calle, o en los jeepneys, o en el bus, y reciben y mandan sms sin parar. Pero incluso para citas oficiales, o negocios de cualquier tipo, sólo usan los sms. El mail…¿para qué? ¡Si tienen el móvil! Y por supuesto, algunos sms son de broma. Les encanta mandar citas bíblicas, o mensajes horteras de “reenvío” sobre lo mucho que les importas (aunque te hayan visto una vez en su vida), me parto de risa. Por ejemplo, conocí en un Congreso Forestal a un señor que es el director del Departamento de Medio Ambiente en una de las Regiones de Filipinas. Pues me “texteó” a los dos días, con un mensaje que dice lo siguiente: “May your home be blessed…your love be rewarded…and your life enriched by GOD to whom we give thanks for all we have!” El mensaje, pues está fenomenal, pero es como si el consejero de Medio Ambiente de Esperanza Aguirre, os escribiera cosas de este tipo por sms…¿Raro eh?
O por ejemplo, alguien al que no conoces demasiado, te saluda varios días por la mañana, con un mensaje de “buenos días”, abreviado, por supuesto, como buen sms: “Gud a.m.” Y nada más. ¿Contestas o no? YO QUÉ SÉ!-ALGUNA ANÉCDOTA/COMENTARIO QUE TE GUSTARÍA CONTAR DE TU EXPERIENCIA
Una de las bankas (barcas filipinas) tenía este logo…
¿¿Algún filipino que habrá visto una bolsa del Carrefour y ha pintado su barca con el dibujo??
¿¿Carrefour suministra productos surcando los mares hasta llegar a Filipinas, al cabo de 600 días navegando en estas bankas??
(Y POR ÚLTIMO SI QUIERES ENVIAME TU FOTO FAVORITA DE TUS AVENTURAS)
A pesar de haber tenido una experiencia dura, y de que si pudiera ir hacia atrás en el tiempo habría muchas cosas que haría de otra forma, creo que es verdad que de todo se sacan cosas positivas. Eso me ha ocurrido en Filipinas, ¡¡y este cartel me lo encontré allí!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario